
Buenos medios días, estaba deseando llegar para saludaros y escribir un poco. Os saludo y os deseo salud y suerte en el día de hoy, dar gracias a Dios por tenernos vivos y con ciertas ilusiones, que no decaígan, tenemos que seguir adelante y hacer lo que más nos gustem no hacer casi de las charlatanerías de las malas personas, que las hay, pero también las hay buenas, es con esas personas con las que tenemos que estar junto a ellas, borrar las demás de nuestras vidas, gtacias a Dios , y como siempre digo, las personas buenas abundan más que los lirios en primavera ! Gracias Dios por ponerlas en mi camino y apartarme de todas aquellas que ni no te daman con la lengua, te dañan con desstrozando tu vida de por vida y haciendo ver a los cotillas, que la mala eres tú, pero Dios las ve muy bien, a Él no se le puede engañar jamás y el tiempo pone a todos en su sitio…! Sé que hay cambios muy buenos y muy pronto para mí ! Entonces, danzaré con la Reina…! Y, ya dejaré de ser todo aquello que inventan sonre mí….!



“Conserva celosamente tu derecho a reflexionar, porque incluso el hecho de pensar erróneamente es mejor que no pensar en absoluto”.
Esta frase se atribuye a Hipatia de Alejandría, como testimonio de su agudeza intelectual.
Se estima que la filósofa neoplatónica Hipatia nació entre finales del siglo IV y principios del siglo V en Alejandría (Egipto). Debido a su inteligencia su padre, un conocido matemático, astrónomo y filósofo de nombre Teón, decidió enseñarle su oficio y le inculcó el amor por la ciencia. Ella llevó una vida ascética dedicada al conocimiento, destacó en las matemáticas y escribió varios tratados sobre geometría y álgebra. También logró avances en el campo de la astronomía, inventando el densímetro y mejorando el diseño del astrolabio. Su trabajo se perdió en el incendio de la Biblioteca de Alejandría pero todas las fuentes coinciden en su genio, dedicación y ética intachable.


