
Un poco de alegría a la foto familiar que me imagino a mis primos riendo al escuchar esta preciosa y alegre música que no le va nada a la foto familiar de abajo….!Pero a mi me encanta…!
Rosas de jazmines de mamá
Cruzado sobre mi pecho llevaba una especie de bolsa de colores, tal como a mí me gustaba, dentro de aquella bola iba mi onza de chocolate mi pan blanco de pueblo y una naranja, me montaba de un salto en la bicicleta y a pedalear, no temía aquella horrible calor, porque luego me iba al pantano a meterme en aquellas aguas dulces del lago.
Desde mi baño y mojando mi rebeldes cabellos, me gustaba ver Bornos, era mágico verlo desde las aguas y al tras-luz del sol, Bornos se hacía de oro.
Sus torres parecían ser de otros tiempos cubiertas de aquella luz dorada mientras las cigüeñas plateadas repiqueteaban con sus largos picos naranjas…
Mi piel morena brillaba cada vez que salía de aquellas aguas y resbalaban por mi cuerpo adolescente.
Me gustaba tomar aquella onza de chocolate y tomarla con el pan y quedarme como ausente mirando el paisaje de mí pueblo que me fascinaba. Dehesas y casas blancas salpicadas como flores bajo el manto de una vegetación veraniega y bella…
Escuchaba voces y eran otros niños jugando con perros, me echaba sobre la toalla y a veces quedaba dormida profundamente, sentía que la tarde llegaba y el sol comenzaba a broncear mi piel, mientras, me iba hacía la orilla y me echaba agua en la cara, sentía sed y me tomaba la naranja que María Núñez me ponía con todo su cariño en el bolsito de bandolera, respiraba el olor a tomillo de la caldera del alambique que el viento me traía a ráfagas y miraba como llegaban a mi pueblo las sombras de otros tiempos mientras las cigüeñas estaban en sus nidos calladas.
Llegaba el momento de volver a casa, de ducharme de cenar algo y de sentarme un rato en la noche junto a mi madre en la puerta de casa. Mamá en su mecedora se mecía sin dejar de abanicarse y me sonreía . Mamá olía a jazmines en verano y a mí me gustaba mucho abrazarla y poner mi cabeza sobre su pecho, cerca de su rosa de jazmines que olía a gloría bendita…


