ZACHEL
Zachel me esperaba sobre las flores del azahar, había llovido y las gotas sobre aquellas plantas de delicado olor, parecían perlas transparentes que bailaban sobre la verde naturaleza de aquella primavera, el arco-iris a lo lejos, me hacía con sus bellos colores, saborear las frutas más sabrosas y los caramelos más deliciosos…
Caminaba cabeza abajo y taciturna en mis pensamientos, no quería equivocarme de nuevo, y no sabía, si realmente lo estaba haciendo con aquellas personas que llegaban a mi vida, había cosas que no me cuadraban, y eso me hacía pensar……¿porque? De todas formas…¿qué más da?
El caso era, que a mí sí, que no me daba igual…
Sé que la vida es una gran marea de humanos que solo intentan sobrevivir, y muchos a costa de lo que sea y como sea……! Con lo fácil que es todo y como nos complicamos! Es como amar a Dios…! Con lo fácil que es El y lo difícil que nos lo pusieron otros hombres con tantas leyes!
Zachel me abrió sus brazos y yo me refugie en ellos en silencio….él sabía que nada podía decir, solo quería hacerme sentir su yo en mi, Mi ángel, siempre viene en los momentos en los que él sabe que necesito de su apoyo y solidaridad…
Tomó mi mano y sin decir nada, me acurruco entre sus alas y me protegió de la marea negra de la vida……sah! Tranquila mi bien… Mira tú estrella y sueña con ella y con todos los que allí te esperan, pero antes, están tus sueños acá en la tierra, no decaigas mi niña ante el mal, te traigo fuerza y suerte…..! Confía y no olvides que lo conseguirás!
Zachel me llevo a mis sueños y con ellos reí feliz… Los ángeles del cielo me llenaron de amor……! Sigue Charín! Sigue y no decaigas nunca, no dejes de ser fuerte, porque tus sueño te esperan y con ellos, el reconocimiento que siempre deseaste. No decaigas niña, no decaigas ahora….
Zachel, se montó en el arco-iris y por el horizonte desapareció, mientras yo quedaba con las flores del azahar de la recién estrenada primavera.
ZACHEL Y MIGUEL ME VISITAN…
Zachel llegó anoche con una enorme vara de flores de almendros entre sus manos, me miró complaciente y me sonrió, mis ojos se llenaron de lágrimas, pues hacía tiempo que no veía a mi querido ángel. Lo acompañaba otro ángel de firmes rasgos y a la vez delicados y llenos de paz y fuerza. Lo miré absorta por tanta energía y luz, él sonrió de nuevo y corrí hacia Zachel y lo abracé, aquel magnifico ser contemplaba la escena con absoluto amor y Zachel me dijo:
-Él es un arcángel de Dios, te quiere mucho Charín, desde que eras una niña y temías ver al mal bajo la gran espada de Miguel. –
Aquél arcángel tan lleno de Dios y de sabiduría me acercó su mano, mirando a Zachel este afirmó sonriendo mi callada pregunta, tomé la mano de Miguel, y Él entonces, me tomó entre sus brazos de intensa luz y beso mi frente y mis manos, como tantas veces hizo Zachel, tímidamente aceptaba aquellos besos que no sabía interpretar, yo quería abrazarlo y decirle cuanto lo quería y lo necesitaba, quería que le dijese a la gran energía del creador cuanto le amaba!! !!Que no me dejase sola jamás y me protegiese de aquellos que deseaban mi mal o hacerme daño…
-!!Nadie te lo va a ser querida, aunque te lo parezca, no lo vamos a consentir, no irán más allá, del mal que quieran y deséen para ti, se les volverá con furia contra ellos…!- fue entonces, cuando hice lo que quería hacer, le di un gran abrazo y le dije que también lo quería mucho, su luz pareció resplandecer más y una calma interior invadió mi espíritu junto con aquel arcángel de Dios llamado Miguel!!
Zachel se acercó y me entregó aquella preciosa vara de almendro en flor y miguel sacó lirios y azucenas de su corazón.
-Los dos estaremos junto a ti, no tengas miedo, siempre cuidaremos de nuestra niña y también una legión de ángeles que no te dejaran!! Tú alma será como estas azucenas, estos lirios y estas flores de almendros tan amada en los cielos por Dios!! ! No temas….estamos contigo una vez más!
